Durante 2021 el programa de Subsidios Familiares ha llegado a 143 nuevos beneficiarios en los departamentos de Chimaltenango, Baja Verapaz, Jalapa y Sacatepéquez, contribuyendo en la mejora de la calidad de vida de niñas, niños y adolescentes con discapacidad.

Esta asistencia económica se concede a algunas familias consideradas en situación de vulnerabilidad y debe emplearse exclusivamente para las necesidades de las niñas, niños y adolescentes con discapacidad física, sensorial, intelectual o múltiple; el aporte no puede ser entregado durante más de cuatro años y tampoco a personas que no califican al programa.

La subsecretaria de Preservación Familiar, Lourdes Isaacs, explicó que el programa cuenta con disponibilidad presupuestaria para aproximadamente 2 mil 400 familias a nivel nacional. Sin embargo, el nuevo ingreso de casos es posible por la finalización de contratos anteriores.

“Por parte de Sedes Departamentales de SBS, se hicieron diferentes visitas a municipalidades para dar prioridad a las localidades, posteriormente se realizaron supervisiones domiciliares para verificar la condición de vida de las familias y luego los casos fueron sometidos a evaluación en una junta técnica”, agregó Isaacs.

Más que dinero

Además del beneficio económico, este programa también realiza monitoreo y supervisión, asesoría y orientación para el uso correcto del subsidio, así como la adhesión al programa Educando en Familia como requisito indispensable.

“Por instrucciones del señor presidente Alejandro Giammattei estamos acercando los programas a la gente en beneficio de la niñez y adolescencia guatemalteca”, dijo el secretario Francisco Molina, durante su reciente visita a Mataquescuintla, Jalapa, en donde un grupo de familias firmó los nuevos contratos.